martes, noviembre 30, 2010

Papá

He llamado a mi padre, me hacía mucha falta hablar con él y me ha dicho:
"Juégatela cariño, juégatela!"

Gracias papá.

lunes, noviembre 29, 2010

Primera nevada.

Aún no es diciembre y ya he superado el número de post del año pasado.
El año pasado andaba tan agobiada que llegar a cualquier cifra era un puñadito más de estrés.
Ahora he aprendido a que no exista un solo motivo que no me permita escribir.
No he salido de la agencia hasta las 9 y media de la noche. De hecho, apenas me he levantado de mi sitio.
12 horas después de salir de casa, vuelvo con un paraguas rosa que no es mío y pienso en muchos por qués y para qués.
Voy con la autoestima tocada, que no hundida. Se lo que valgo, más o menos.
Tengo muy claro que soy muy capaz de mucho más.
Se que hay algo mucho mejor dentro de mi. Lo que pasa es que no encuentro el entorno que me ayude a sacarlo.
Porque en este entorno que yo tengo ahora, si saco todo lo que puedo ser, corro el peligro de desperdiciarlo tontamente.
Y yo se que hay un sitio, un lugar, una persona, unas personas, una canción, que puede sacar de mi algo mejor.
Pero aún no he encontrado el camino para llegar a todo eso.

Esta semana he hecho muchos favores, más de los que debería. No me suponen nada, más que tiempo.
Pero tampoco me aportan nada ni me hacen aprender. Son trocitos de ti que puedes dar porque no se agotan. Pero agota no parar de abrirte para darlos.

jueves, noviembre 25, 2010

goodnight

Y ahora me chuto la radio clásica y vuelvo a mi planeta.
Ese del que nunca debería salir, porque allí hago más falta
y soy menos torpe.

Cent

De camino a casa entro en el Saveco chino de Luna. Es de noche, y hace un frío de aupa.
Una señora de mediana edad con apariencia normal me pide que le ayude. Me pide que le diga cual de todas las bolsas
de frutos secos, sean de lo que sean, es la más barata.
Dice que ella no lo ve. Yo le cojo la más barata y le digo que son anacardos y me voy a por unos yogures y una bolsa de gusanitos.
Estoy llegando a la caja para pagar y oigo desde el pasillo como la señora levanta la voz diciendo:
Son solo 10 céntimos, no llevo más, vivo aquí al lado. No podéis dejarme que baje mañana y os lo traiga?
....
Mañana no lo va a traer, porque si vive ahí al lado, lo lógico es que suba ahora y baje los 10 céntimos.

10 céntimos que a mi, que soy un puñetero desastre con las carteras, los bolsillos y la administración en general me representan la nada.
Cojo carrerilla, llego a la caja y se los doy al chino sin mirarlo.
Ella sigue diciendo que no puede creérselo. Me da las gracias, me pregunta donde vivo.
Yo no quiero que me de las gracias, no quiero que me diga nada, quiero que se calle, y que el chino deje de murmurar.
Solo quiero que esos 10 centimos sigan siendo absolutamente nada y no una prueba horrible de lo miserable que es el dinero.

martes, noviembre 16, 2010

:)

Hay algo que brilla

domingo, noviembre 14, 2010

Supongo que hay miles de cosas que aún tengo que descubrir.
Ayer fué un día largo y raro con muchas cosas... y después llegó una noche intensa y preciosa.
Fío vino a casa, acababa de regalarle la viuda de Benedetti un libro de la biblioteca personal de su marido. Lo llevé al Fabuloso, estaba vacío, es un sitio con mucha magia. Viendo esos moños alto llenos de flores al más puro estilo pin-up que llevan las camareras no es de extrañar que en el baño haya, a modo decoración, un secador de peluquería antigua y una butaca. Pero la diferencia esta en los detalles y ese secador de pelo no tendría tanta magia si no le hubieran colocado justo al lado un bote de laca Nelly de 100 ml, vacío, como si fuera de poliespán pero sin serlo.
Entrar en el fabuloso es entrar en otra época, en otra vida paralela más bonita y más kitsch.
Circo, la realidad, la coquette, el fabuloso... voy a sitios con nombres tan guays que es imposible que no le gusten a todo el mundo.

sábado, noviembre 13, 2010

Hace semanas subí esta canción aquí

Esta noche la dejé sonando en loop muy bajita, me he despertado con ella y ha seguido sonando toda la mañana y sigue ahora. Me pregunto por qué no me cansa. Nunca me había pasado algo así. no es muy normal.

miércoles, noviembre 10, 2010

fm

Hace días la radio de mi móvil ha decidió entrar en fase poltergueist.
Yo, que soy muy de escuchar la radio por las noches, como los adolescentes y las señoras mayores. Y también soy muy de acojonarme viva con cualquier ruidito tonto que rápidamente catalogo como fenómeno paranormal... pues lo he estado pasando regular estas noches.
Pero ayer fue un día bonito, bonito de verdad y se me pasó todo.
Y esta mañana he recibido una pequeña buena noticia y la radio, como por arte de magia, ha vuelto a su estado normal.
Y sigo sin saber muy bien qué hago aquí pero cada vez tengo más claro que, como poco, estoy aprendiendo cosas, como por ejemplo a saber esperar que la radio pueda volver a funcionar.

martes, noviembre 09, 2010

Martesdomingo day

Mientras desayuno en este rarísimo día libre que ni es puente ni es nada, veo en la tele a un señor que cuenta que lleva 7 años preso por un delito que nunca cometió. La vida puede ser de lo más injusta.

Dice que lo peor no es que le quiten la libertad sino que le hayan quitado su dignidad y su credibilidad.
Otro señor del público que aún tiene migas del bocadillo de mortadela que le han dado por asistir al programa, levanta la mano para hacerle 5 preguntas, pone cejas de sospecha y lanza preguntas con tono inquisidor que vuelan como cuchillos hacia el acusado, al cual no conoce de nada, de hecho solo hace 5 minutos que ha escuchado una resumida historia sobre sus 7 años de sufrimiento.
La pantalla se divide en 2 , en una se ve al señor del bocadillo de mortadela con cara de tener derecho a sospechar al acusado, en la otra se ve al acusado con una cara de lo siento permanente que lo ha llenado de arrugas en menos años de los que debería.
Se nota que ese hombre ya se ha acostumbrado a respirar pidiendo disculpas y justificando cada cosa que hace. Porque siempre será culpable para todos los que se aburren, para todos los que se frustran para todos los que no tienen otra cosa que hacer que señalarlo con el dedo para desviar la atención y sentirse por un momento reyes de un mundo justo, para todos los que no se molestan ni en quitarse las migas del bocata de mortadela.

miércoles, noviembre 03, 2010

a g o t a d a

martes, noviembre 02, 2010

....

Estaba a punto de irme y mi madre se sentó a mi lado mientras hacíamos tiempo para salir hacia la estación.
Me preguntó si me acordaba de ellos cuando estaba aquí, en Madrid. Si los echaba de menos.
Le dije que si, que muchísimo. Es difícil que ella sepa lo mucho que pienso en ellos con esta respuesta.
Ella continuó preguntándome, cuánto los echaba de menos y terminó diciendo bajito que esta situación era un asco.
La situación es que yo estoy aquí y ahora no hay ninguna razón tangible por la que deba quedarme más que la de vivir mi propia vida. Que no es poco. Y muchos días me cuesta levantarme y tirar, claro. Y claro que preferiría que todas esas mañanas María me diera un abrazo y me apretara con besos y Isa me llevara a desayunar y mi madre hiciera que la casa oliera siempre a casa y mi padre estuviera por aquí a la hora de la comida contando algún chiste malo. Y me abrazaran un montón, como siempre, y es eso,seguramente, lo que más echo de menos de todo cada día.
Pero estoy intentando no pedir disculpas por todo. Porque yo tampoco sé cómo hacer lo correcto para vivir... o lo que sea.
Y tampoco veo a nadie que lo haga mucho mejor.

lunes, noviembre 01, 2010

Egoist

Mirar a los demás con ternura
nos hace relajarnos, ser más felices y vivir mejor.